El Señor es mi Pastor, nada me falta.
Muchos funerales tienen el vigésimo tercer salmo como el salmo responsorial. Da consuelo a aquellos que están afligidos y están llenos de tristeza. Hay un sentido que en la pérdida, hay una esperanza de vida eterna. Que Dios proporcionará y aceptará a aquellos que han muerto, pero también aceptará a aquellos de nosotros que creemos y que todavía están aquí en la Tierra. A través de las palabras de este salmo, Dios ofrece compasión y consuelo. Este salmo también nos enseña la gracia de administrar compasión y consuelo el uno al otro.
Jeremías tiene palabras duras para los líderes religiosos de su tiempo. Estos líderes religiosos han hecho tan mal que Dios ahora dice que vendrá a pastorear a su pueblo, echando fuera a estos falsos pastores que se alimentan de las ovejas de Dios, no ofreciendo asistencia o ayuda para aliviar sus cargas. ¿Por qué han fallado? Anteriormente en el libro de Jeremías aprendemos que los líderes religiosos se han vuelto tan encaprichado con la grandeza y la belleza del templo del Señor. Y como son líderes religiosos, piensan que son mejor que sólo la gente común. Se separan ellos mismos y conceden muchos artículos caros para ellos mismos. Todo esto gravando fuertemente a la gente. Mientras tanto, los huérfanos y las viudas pasan hambre y no son atendidos. Los líderes religiosos no tienen compasión por la persona común.
Esto se conecta con el Evangelio de una manera especial hoy en día. Los discípulos fueron enviados por Jesús para echar fuera demonios, sanar a los enfermos, y compartir el mensaje del perdón. Han regresado emocionados y compartiendo todo lo que ha sucedido. Jesús se da cuenta de que necesitan algún tiempo para reflexionar y dar gracias por todo lo que ha sucedido. Les invita a venir a un lugar tranquilo y a descansar. Este es un buen consejo para todos nosotros. Cuando trabajamos duro, debe haber un tiempo y un lugar donde podamos encontrar descanso y agradecer a Dios por todo lo que Él nos ha dado. Pero entonces se nos dice que mucha gente viene a encontrar a Jesús. Los discípulos y Jesús no pueden encontrar un lugar tranquilo para descansar. Es en este punto en el evangelio de Marcos que Jesús comenzará ahora a compartir milagros eucarísticos y enseñarles que Él se convertirá en su alimento; Su Cuerpo y Sangre los alimentarán. Jesús es el buen pastor que pone su vida por la gente.
Su corazón está abrumado por lalástima, Jesús tiene compasión por la gente. Aunque usted puede estar agotado o cansado, cuando usted tiene compasión por la gente, su corazón le da fuerza para responder. Es como un padre que ha trabajado todo el día y está agotado. Sin embargo, encontrarán la fuerza para preparar una comida para sus hijos. La segunda lectura nos anima a no contar el costo, sino a abrir nuestros corazones para cuidarnos unos a otros, para tener compasión por los menos afortunados, para encontrar la fuerza para ayudar a otros incluso cuando estamos agotado. Podemos confiar en Jesús para alimentarnos y nutrirnos y darnos fuerza para continuar.
Que el Señor os bendiga en el nombre del Padre y del Hijo y del Espíritu Santo. Amén